El Hotel Puerta América de la cadena Silken es un homenaje al diseño por excelencia. Decorado por varios de los arquitectos y diseñadores más famosos del mundo, cada planta nos sumerge en un estilo y personalidad diferentes. Jean Nouvel, Zaha Hadid, Arata Isozaki, Javier Mariscal, Victorio y Lucchino son sólo algunos de los genios que han impregnado de su estilo las paredes de este singular edificio.
Fueron los directivos de la cadena Silken los responsables de crear un hotel único en el mundo que aunara distintos modos de ver la arquitectura, el diseño y el arte. 13 nacionalidades diferentes y 75 millones de euros hicieron el resto.
Cada una de estas plantas merece sin lugar a dudas los más profundos elogios de aquellos que apreciamos la arquitectura y el diseño bien hecho, sin embargo nos van a permitir que nos centremos en la 5ª Planta, la diseñada por Victorio y Lucchino.
Después de conseguir grandes logros en el mundo de la moda, abren puertas a nuevos mercados, explorando el mundo de la decoración e interiorismo.
Confort y serenidad son las dos palabras que mejor definen su trabajo en el Hotel Puerta América. Como debería ocurrir siempre que se diseña un hotel, la premisa fundamental era conseguir que el cliente se sintiera cómodo, y para ello los diseñadores han apostado por texturas y colores cálidos, así como por el uso de elementos de tendencia barroca.
Aunque en su momento tuvieron alguna crítica al ser comparados con el resto de las plantas del hotel, en el ranking de ocupación la 5ª planta es la primera. En el hall las paredes son de laca negra, las butacas de terciopelo y el suelo “ Black Kafe” envejecido, el material de las mil caras. Dos esfinges de mármol blanco, de la colección particular de los diseñadores, se alzan hieráticas en medio del lobby.
En el baño, reina el confort y la armonía con la firma indiscutible de Victorio y Lucchino. Funcional como deberían ser todos los baños pero sin perder de vista la belleza de sus formas.